Cambiaré impresiones con todos vosotros de cómo afrontar cualquier contratiempo que la vida te coloca delante de tu puerta emocional. Procuraré dejar constancia de dónde procede el temor a no ser suficiente y que aquello que llamas “fracaso”(tropiezo) no existe, lo que realmente existe es la idea de sentirse fracasado, ya que ese sentimiento se instala en ti porque tú se lo permites; porque así decides vivirlo.
Si realmente el amor es la repuesta ¿Por qué nos cuesta tanto encontrarlo en nosotros mismos? Sencillamente por qué nos han “instalado” una versión del amor, que no ama, sino sencillamente espera ser amada. Esta versión lo primero que consigue es que vivas desvinculado de ti y conviertas “al otro” en un RELLENADOR DE TUS CARENCIAS. Enamorado, enamorada, procede de : EN AMOR DADO, EN AMOR DADA. Tu cometido más relevante es Identificarte con lo que ya eres, reconocerte en tu perfección en tu propia aceptación.
Un día me encontré con dos monjes budistas en el aeropuerto y tras un largo cambio de impresiones me comentaron lo que ellos hacían en diferentes momentos del día (3 preguntas de autoindagación antes de irse a dormir y 3 reflexiones al levantarse) para medir su temperatura anímica y desde ese sentir, autoregularse hacia un estado de ECUANIMIDAD interna.
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